El trasplante de microbiota fecal (FMT, en sus siglas en inglés), que ayuda a restaurar una mezcla saludable de bacterias en el intestino, puede ayudar a revertir el deterioro de la función cerebral en personas con insuficiencia hepática, según un informe presentado en el Congreso Internacional del Hígado celebrado en Viena.

Las cápsulas de FMT llevaron a la restauración de la diversidad bacteriana en el intestino y al mejoramiento de la función cognitiva en personas con encefalopatía hepática como consecuencia de una cirrosis avanzada, informó el Dr. Jasmohan Bajaj, de la Virginia Commonwealth University.

Durante años o décadas, la hepatitis B o C crónica, la enfermedad del hígado graso, el consumo excesivo de alcohol y otras causas de lesión hepática pueden conducir a cirrosis, carcinoma hepatocelular e insuficiencia hepática terminal que requiere un trasplante.

En las personas con cirrosis descompensada, el hígado ya no puede llevar a cabo sus funciones vitales debido a la acumulación de tejido cicatricial y al bloqueo del flujo sanguíneo. Las complicaciones pueden incluir ascitis (acumulación de líquido en el abdomen), venas sangrantes en el esófago y encefalopatía hepática, que ocurre cuando el hígado ya no puede filtrar el amoníaco y otras toxinas.

Los síntomas de la encefalopatía hepática pueden incluir deterioro cognitivo, falta de concentración, confusión, cambios de personalidad y coma. Con el tiempo, los ataques recurrentes de encefalopatía pueden conducir a daño cerebral duradero, según el Dr. Bajaj. Los tratamientos incluyen lactulosa, un azúcar no digerible que absorbe el amoníaco y actúa como un laxante, y el antibiótico no absorbible rifaximina.

La lactulosa y los antibióticos pueden cambiar la composición de las bacterias en los intestinos, conocida como microbioma intestinal. Algunos tipos de bacterias intestinales producen amoníaco, que empeora la encefalopatía, mientras que otros desencadenan una inflamación sistémica.

Los estudios han demostrado que alterar el microbioma intestinal puede ayudar a prevenir o mejorar la encefalopatía hepática. Por ejemplo, la investigación presentada en el Congreso Internacional del Hígado 2013 mostró que un suplemento probiótico reduce los niveles de amoníaco, mejora la función cognitiva y previene la progresión de la encefalopatía en personas con enfermedad hepática avanzada.

Trasplantar bacterias intestinales de un individuo sano es otra forma de restaurar un microbioma beneficioso. La FMT consiste en transferir las heces del donante a través de una formulación de enema o cápsulas orales.

El Dr. Bajaj y sus colegas demostraron anteriormente que la FMT a través del enema mejoró la función cognitiva y redujo las hospitalizaciones en personas con cirrosis hepática avanzada. Luego evaluaron la seguridad, la tolerabilidad y la efectividad de una formulación en cápsula, que es más conveniente y puede suministrar bacterias beneficiosas al intestino delgado, no sólo al colon.

Este estudio de fase I incluyó a 20 personas con cirrosis y encefalopatía hepática recurrente que estaban recibiendo lactulosa y rifaximina. Los participantes fueron asignados al azar para recibir 15 cápsulas de FMT o cápsulas de placebo similares además de su terapia existente.

Las cápsulas se prepararon con heces de un solo donante, el mismo llamado “super pooper” que donó para el estudio de enema FMT, con altos niveles de especies beneficiosas de bacterias Lachnospiraceae y Ruminococcaceae. El Dr. Bajaj enfatizó que las cápsulas “no huelen a caca y no saben a caca”.

Al inicio del estudio, la diversidad microbiana en muestras de heces y muestras de biopsia del intestino delgado (duodeno) y del intestino grueso (colon sigmoide) fue similar en ambos grupos. Sin embargo, después de dos a cuatro semanas de tratamiento, las personas en el grupo de FMT vieron un aumento en la diversidad bacteriana, con más bacterias Ruminococcaceae y Bifidobacteriaceae y una disminución en las especies de Streptococcaceae y Veillonellaceae. Las muestras de biopsia de duodeno también mostraron una reducción en los biomarcadores de la inflamación.

Las puntuaciones de la función cognitiva con una prueba de evaluación estandarizada mejoraron en el grupo de FMT en comparación con el grupo de placebo. Sólo un participante requirió hospitalización o murió en el grupo de FMT, mientras que seis lo hicieron en el grupo de placebo. El número total de hospitalizaciones también fue significativamente menor en el grupo de FMT. No se identificaron problemas de seguridad durante el estudio.

“El trasplante de microbiota fecal con un solo donante de heces enriquecido con especies bacterianas que sabemos son deficientes en esta población es un enfoque prometedor para el tratamiento potencial de los pacientes con cirrosis y encefalopatía hepática recurrente”, afirmó el Dr. Bajaj. “El camino al cerebro es a través del intestino”.

 

Fuente: infohep.org

Referencia: Bajaj JS et al. Fecal microbiota capsules are safe and effective in patients with recurrent hepatic encephalopathy: a randomized, blinded, placebo-controlled trial. International Liver Congress, Vienna, abstract PS-087, 2019. Journal of Hepatology 70:55, 2019.

Noticia traducida por AMTHC