Especialistas españoles en trasplante revisan la más reciente evidencia científica en torno al rechazo mediado por anticuerpos en trasplante renal, hepático, de pulmón y cardíaco.

Cerca de 200 especialistas se han dado cita en Madrid en la 7ª edición de la reunión Detecta para revisar el papel de la inmunosupresión en el trasplante y analizar la más reciente evidencia científica en torno al rechazo humoral en trasplante renal, hepático, de pulmón y cardiaco. Esta iniciativa, organizada por Astellas Pharma, cuenta con el aval de la Sociedad Española de Trasplantes.

Las personas que reciben un trasplante deben recibir de por vida un tratamiento inmunosupresor para evitar el rechazo del órgano trasplantado.  Abandonar esta terapia o no cumplirla correctamente, puede provocar la aparición de anticuerpos anti-HLA (conocida como rechazo humoral), que podrían ocasionar la pérdida de injerto.

Esta 7ª edición ha contado con la participación de ponentes de referencia, tanto nacionales como internacionales, bajo la coordinación del doctor Daniel Serón, jefe del Servicio de Nefrología del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona.

Tal y como señala este experto, “el rechazo crónico humoral constituye la primera causa de pérdida del injerto”. Además, explica que “hoy en día no hay ningún tratamiento que haya demostrado su eficacia en el rechazo humoral crónico, si bien se están evaluando nuevos tratamientos”

Por su parte, el doctor Francesc Moreso, jefe de la Unidad de Trasplante Renal, del mismo centro hospitalario, apunta que “durante el primer año postrasplante, una minimización excesiva de la inmunosupresión con tacrolimus (niveles valle <5-7 ng/mL) y/o MMF (dosis <1,5 g/día) y/o esteroides se asocia con la aparición de episodios de rechazo agudo clínico y subclínico y con el desarrollo de anticuerpos donante-específicos de novo (dnDSA)”.

En esta misma línea, el doctor Emilio Rodrigo, del Hospital Marqués de Valdecilla, apunta que “la mala adherencia al tratamiento, los niveles bajos de anticalcineurínicos y una alta variabilidad de los mismos son factores de riesgo de activación de la respuesta humoral, con aparición de dnDSA y rechazo mediado por anticuerpos, y de pérdida de los trasplantes”.

 

Fuente: consalud.es